La estación más calurosa del año está a la vuelta de la esquina, y no hay nada más importante que cuidar la piel antes del verano.
Muchos son los consejos y recomendaciones que existen para este tipo de procedimientos, pero muy pocos son los pasos necesarios para conseguir los mejores resultados y poder lucir una piel perfecta en verano.
Para cuidar la piel antes del verano puedes acudir a tu centro de estética y consultar con un especialista. Ellos están al tanto de las últimas novedades en tratamientos y productos, gracias a los numerosos cursos de estética que su personal realiza constantemente para estar renovados en una profesión en constante cambio.
Pero si prefieres preparar tu piel en casa y de forma cómoda, sólo tienes que seguir leyendo lo que te contamos a continuación.
Os explicamos los productos más recomendados para la preparación de la piel, así como los pasos más importantes a seguir y todos aquellos aspectos a tener en cuenta.
¡Empezamos!
Preparación del rostro
El rostro es el espejo del alma, el elemento más visible de la imagen integral de cualquier persona y, por tanto, uno de los que más hay que cuidar.
El cuidado y la preparación del rostro no se llevan a cabo exclusivamente cuando se acerca una nueva estación del año, sino que también es necesario de forma diaria, aunque hoy centraremos nuestra atención en las características propias del verano.
Para preparar la piel del rostro existe un amplio catálogo de productos, así como algunas premisas a tener en cuenta.
Higiene diaria: desmaquillado
El desmaquillado es la base de cualquier preparación facial, sea cual sea la estación. Es el procedimiento responsable de eliminar cualquier tipo de impurezas residentes en el rostro, ya sean restos de maquillaje o elementos procedentes de la polución.
Los productos más empleados para desmaquillar correctamente el rostro son aquellos ideados especialmente para limpiar y proteger la piel.
[Tweet «El desmaquillado es la base de cualquier preparación facial»]
El agua micelar desmaquillante, por ejemplo, desmaquilla con facilidad y elimina cualquier impureza, bacteria o contaminación del rostro, además de proporcionarle la suavidad y elasticidad que la piel necesita.
Junto a este cosmético, el desmaquillante de ojos tratante, el gel crema desmaquillante o el tónico facial con aloe vera, son los más recomendados.
Hidratación
Una vez que la piel del rostro ha sido desmaquillada, es el momento de hidratarla.
Ya hemos visto que, generalmente, los productos utilizados para el desmaquillado ya incluyen ciertos principios activos que velan por la protección y la hidratación del rostro, aunque en estaciones como el verano, es más que aconsejable aportar una doble hidratación.
Para ello, nada mejor que optar por una crema facial que cubra las necesidades específicas de cada rostro.
Cremas de día, de noche, hidratantes para pieles grasas o para pieles sensibles. Un amplio catálogo entre el que escoger aquella que mejor se amolda a nuestras características.
La dermis del cuerpo
Y si importante es la piel del rostro, igual de importante es cuidar la piel corporal. Se trata de una piel con características distintas a la del rostro, y por lo tanto, con necesidades distintas.
Al igual que en el caso anterior insistíamos en el desmaquillado, de cara al verano, la piel del rostro necesita la exfoliación para eliminar las posibles impurezas.
Para ello, productos como el gel de baño exfoliante pueden ser de gran ayuda. Se trata de un gel de baño que te resultará fácil de utilizar, y que ayudará, además, a la renovación celular de la dermis corporal, eliminando las impurezas y evitando la obstrucción en los poros.
Además de la exfoliación, la hidratación se convierte en un aspecto primordial en verano, sobre todo cuando exponemos nuestra piel a constantes depilaciones.
[Tweet «Con la exfoliación renovamos la piel eliminando impurezas y evitando obstrucción en los poros»]
Para mejorar este aspecto, el uso de un aceite post-depil, indicado especialmente para después de la depilación, es la mejor opción.
¡No olvides los pies!
Y por último, y no por ello menos importante, los pies.
El verano es la estación del año que más juego da a los pies. Ellos se convierten, durante un par de meses, en los protagonistas absolutos de cualquier look, pues las sandalias constituyen el calzado por excelencia de esta estación.
Para que presenten un aspecto inmejorable existen algunos productos más que aconsejables, como el baño de leche para pies, que limpia en profundidad, la crema durezas rebeldes, que regenera y protege de la deshidratación, o la crema para pies extrasecos, que exfolia, protege y nutre la piel.
Ahora ya conoces algunos pasos a seguir para cuidar la piel antes del verano.
Sólo tienes que seguir estos consejos y apostar por el cuidado y la protección de la dermis durante la estación más calurosa del año.
¡Y no olvides protegerla de los rayos del sol!