Uno de los aspectos más importantes en el maquillaje profesional son los labios y su maquillaje. No todas las mujeres cuentan con los labios ideales para su rostro, pero conseguir unos labios perfectos es mucho más fácil de lo que parece.

Los maquilladores, expertos en maquillaje profesional, cuentan con infinidad de trucos para hacer de los labios el centro de atención del maquillaje, destacando unos labios perfecto.

Aprende cómo conseguir unos labios perfectos siguiendo algunos consejos y trucos de los maquilladores que podrás aplicar en diferentes momentos del maquillado y desmaquillado de los labios.

Desmaquillado: El primer paso es asegurar que la superficie labial está libre de cualquier resto de maquillaje anterior.

Emplea un disco de algodón o un hisopo, para mayor precisión, impregnado de gel desmaquillante o agua micelar, y seca cuidadosamente con un tisú.

Hidratación: Recurre a un bálsamo a diario cada vez que maquilles el labio.

 

Exfoliación: Usa productos especialmente formulados con gránulo de pequeño tamaño, para eliminar de manera efectiva pero suave las células muertas. Puedes usarlo tres o cuatro veces por semana.

Fricciona el labio con ayuda de un hisopo, sin olvidar el contorno exterior del labio, y seca cuidadosamente con un tisú.

Tratamiento: Para atenuar las arrugas que se forman en el labio superior, conocidas popularmente como “código de barras”, usa serums con ácido hialurónico o algún fluido antiarrugas.

 

Correcciones: Usa correctores en crema, con un pincel apropiado, para ir creando la estructura guía para el maquillaje del labio.

Utiliza un corrector con pigmento verde para atenuar la pigmentación rojiza de las comisuras y el rictus. Difumina hasta que logres uniformidad y utiliza polvos grises para fijar el corrector.

Bases: Utilizando una esponja, borla o pincel, extiende el fondo escogido por las comisuras y los labios.

Si cubres toda la superficie del labio perderás el color rojizo característico y obtendrás una superficie de color neutral.

Si es preciso, perfila por el interior del labio para decrecer su tamaño, en la parte superior o inferior.